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El trabajo.

Foto del escritor: Medita Yoga EstudioMedita Yoga Estudio



Para quienes no tienen una experiencia prolongada o aún no han definido claramente su orientación, recomiendo un enfoque mixto en varias etapas. Esta combinación ayuda a evitar la monotonía y a reducir la distracción mental.

La idea es distribuir el tiempo entre cuatro prácticas fundamentales:

  • Oración

  • Concentración

  • Autosugestión y visualización

  • Silencio


1. Oración (5 minutos)


La oración debe ser completamente libre, personal y espontánea. No se trata de repetir una fórmula, sino de expresar con sinceridad lo que realmente se desea, busca o necesita. La clave es abrirse a la ayuda para lograrlo.



2. Concentración (8-10 minutos)


Esta fase consiste en dirigir la atención de manera sostenida hacia una cualidad que consideremos fundamental para nosotros. Esta cualidad debe estar relacionada con uno de los siguientes aspectos esenciales del ser:


  • Energía: fuerza, voluntad, decisión, perseverancia, seguridad, aplomo.

  • Inteligencia: comprensión, claridad, lucidez, penetración, profundidad, equilibrio.

  • Amor: cordialidad, alegría, afecto, amistad, sinceridad.


Es importante contemplar esta cualidad, saborearla, sentirla desde dentro, sin razonarla. Esta atención contemplativa permite incorporarla en nuestro interior.



3. Autosugestión y visualización (5-7 minutos)


Debemos aprender a condicionarnos y utilizar las grandes posibilidades del autocondicionamiento como una herramienta clave en nuestro proceso de transformación. Nuestro inconsciente debe trabajar en la misma dirección que nuestro propósito.


Si estamos trabajando, por ejemplo, el aspecto de la alegría, podemos emplear frases como:


  • "Soy alegre."

  • "Soy más alegre cada día."

  • "Expreso mi alegría con naturalidad."


Cada uno debe encontrar la frase que mejor represente y exprese lo que desea incorporar en su vida, asegurándose de que sea positiva, afirmativa, concisa y sin contradicciones racionales. Se trata de enviar un mensaje claro y directo a nuestro inconsciente.

Junto con la autosugestión, aplicamos la visualización. Tras repetir la frase elegida, debemos imaginarnos a nosotros mismos encarnando esa cualidad plenamente: ¿cómo nos sentimos?, ¿cómo nos expresamos?, ¿de qué manera influye en nuestras acciones y relaciones? La clave es evocar el sentimiento y la imagen de nosotros mismos actuando desde este estado interior.



4. Silencio (5 minutos)


Finalmente, en esta fase nos mantenemos centrados en la respiración, sumidos en un silencio tranquilo y sereno. Este silencio no es un simple cierre, sino un momento de asimilación y "recolección de la cosecha" de todo el trabajo previo.


 

Distribución del tiempo recomendado:

Oración: 5 minutos

Concentración: 8-10 minutos

Autosugestión y visualización: 5-7 minutos

Silencio: 5 minutos

 

Con la práctica, esta rutina se volverá más natural y podrá ajustarse según las necesidades individuales. Al principio, los resultados pueden no ser inmediatos, pero con constancia, los efectos positivos se harán evidentes. 📖 Basado en El trabajo interior, Antonio Blay.



 

En la siguiente meditación guiada, el psicólogo David Blanco induce la relajación a través de una visualización, a la que sigue el ejercicio de reeducación del inconsciente en la voz del propio Antonio Blay (22 minutos en total).

Ejercicio de la reeducación del inconsciente, para hacer que tu inconsciente pase a ser tu aliado.

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